¿Qué es la fisioterapia respiratoria y por qué no todos los fisioterapeutas pueden ejercerla?
¿Qué es la fisioterapia respiratoria y por qué no todos los fisioterapeutas pueden ejercerla?
Cada vez son más los profesionales de la salud y enfermos respiratorios que saben que la fisioterapia respiratoria es un componente fundamental dentro de los programas de rehabilitación pulmonar. Gracias a estos tratamientos, el paciente respiratorio crónico puede recuperar su función pulmonar, mejorar los síntomas y conseguir una mayor calidad de vida.
Pero ¿qué es exactamente la fisioterapia respiratoria?
Es una disciplina especializada que engloba un conjunto de técnicas basadas en el conocimiento de la fisiopatología respiratoria para prevenir, curar o, algunas veces, tan solo estabilizar, las alteraciones que afectan a su sistema respiratorio
“La fisioterapia respiratoria mejora la calidad de vida de los pacientes con enfermedades respiratorias crónicas, ya que permite ralentizar el deterioro progresivo de la enfermedad”
Antonio Ríos, coordinador del Área de Fisioterapia Respiratoria de la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica.
Si nunca había oído hablar de ella, seguro que al escuchar la palabra “fisioterapia” le vienen a la mente los masajes para relajar la musculatura o los estiramientos.
Es cierto que tiene por objetivo tratar la musculatura respiratoria, pero desde un punto de vista terapéutico, a través de técnicas y ejercicios, y en algunos casos, utilizando ayudas instrumentales.
Menos secreciones, menos infecciones
El papel del fisioterapeuta en cuidados respiratorios esta históricamente asociado al manejo de secreciones.
A través del uso de diferentes técnicas de limpieza bronquial, el paciente mantiene una correcta función pulmonar. De este modo, evita agravar la sintomatología de su enfermedad pulmonar.
Una persona con gran acumulación de mucosidad adherida a los bronquios, si no consigue despegarla y expulsarla por sí mismo, necesita ayuda porque sino, esta situación le llevaría a una infección respiratoria.
Eliminar secreciones no es su única función
La fisioterapia respiratoria también ayuda a:
- Reducir la sensación de falta de aire o ahogo y el cansancio físico.
- Fortalecer la musculatura de brazos y piernas.
- Conseguir una tos efectiva.
- Enseñar sobre aerosolterapia y oxigenoterapia.
- Ayudar en la limitación de los esfuerzos físicos.
- Preparar al paciente para afrontar una cirugía torácica en mejores condiciones y tener mejor una recuperación.
“Los programas de rehabilitación pulmonar están diseñados para mejorar la calidad de vida de los pacientes respiratorios crónicos, y aunque no curan la enfermedad, si ayudan a estabilizarla”.
¿Cuándo es conveniente que realice un tratamiento de fisioterapia respiratoria?
Los tratamientos de fisioterapia respiratoria están indicados si:
- Tiene una enfermedad pulmonar crónica (EPOC, asma, bronquiectasias,...)
- Tiene una patología aguda como neumotórax o neumonía.
- Tiene una enfermedad neuromuscular que afecta a sus músculos respiratorios.
- Está pendiente de una cirugía torácica y necesita prepararse para antes y después de la intervención.
- Padece debilidad muscular y respiratoria que le impide realizar las actividades del día a día.
En el caso de los niños:
- Si tiene una enfermedad respiratoria aguda: bronquiolitis, bronquitis, neumonía o atelectasias.
- Si tiene una enfermedad respiratoria crónica: asma, fibrosis quística o bronquiectasias.
- Si tiene una patología respiratoria que le genera gran acumulación de mucosidad: sinusitis, rinitis, hipertrofia adenoides y amigdalar.
- Si le han realizado una cirugía torácica: cartiopatía o traumatismo torácico.
¿Qué es lo que va a conseguir con este tratamiento?
Ya sabe para qué es y para qué sirve la fisioterapia respiratoria, pero ¿conoce qué tipo de beneficios puede aportarle?
En el caso del paciente pediátrico, el tratamiento de fisioterapia respiratoria se centra en aplicar técnicas de limpieza bronquial para:
- Eliminar secreciones
- Mejorar su función pulmonar
- Reducir su medicación
- Evitar recaídas y continuos ingresos hospitalarios.
En el paciente adulto con enfermedad pulmonar crónica, se diseña una plan de rehabilitación respiratoria que le va a permitir:
Conocer las técnicas de control respiratorio:
Son técnicas sencillas, que puede aprender fácilmente en las sesiones para luego incorporarlas en su día a día.
El objetivo es enseñarle a respirar correctamente con el fin de reeducar su patrón ventilatorio, fomentar el ahorro de energía y mejorar la sensación de disnea y ansiedad.
Las técnicas utilizadas en este caso son: la respiración diafragmática y la respiración costal.
Conseguir drenar las secreciones:
El objetivo de estas técnicas es ayudar a despegar y movilizar sus secreciones bronquiales, además de prevenir infecciones respiratorias.
Gracias a ellas, también aprenderá a toser de forma eficaz, para que pueda expectorar por sí solo, conseguir movilizar su mucosidad y expulsarla sin realizar grandes esfuerzos. En los niños más mayores y que ya colaboran, también se les enseña a toser para que puedan eliminar el moco.
La técnica utilizada para ello es la Aceleración del Flujo Espiratorio (AFE).
En aquellos casos donde la enfermedad está en un estado muy avanzado, la ayuda del fisioterapeuta respiratorio es fundamental para realizar este tipo de técnicas, incluso, podrá apoyarse en dispositivos mecánicos que faciliten la eliminación del moco, como son: el ambú o el Cough Assist.
Realizar ejercicios de expansión torácica
El objetivo de estos ejercicios es aumentar la ventilación, prevenir deformidades y mantener la movilidad de su caja torácica.
Los ejercicios consisten en movilizaciones del tórax y los brazos acompañadas de una correcta respiración.
En este vídeo del Hospital de la Santa Creu i Sant Pau de Barcelona, muestran todas las técnicas respiratorias que le acabamos de comentar.
Mejorar el entrenamiento al esfuerzo
Las enfermedades pulmonares crónicas originan cansancio, fatiga y falta de aire ante el más mínimo esfuerzo, como puede ser subir escaleras, o incluso el simple hecho de caminar.
¿Qué ocurre?
Pues que, al fatigarse y quedarse sin aliento, evita realizar todas aquellas actividades en las que aparecen estos síntomas, por lo que cada día va a hacer menos ejercicio.
Eso hará que sus músculos vayan debilitándose cada vez más, se sienta más cansado y note cómo su estado de salud empeora.
Ante esta situación, si no pone de su parte y se mueve, al final le costará mucho más hasta levantarse del sillón.
Por decirlo de alguna manera, "la pescadilla que se muerde la cola":
“No me muevo porque me canso y me canso porque no me muevo”
Por eso es fundamental que se mantenga y realice ejercicios que estén adaptados a su situación.
El fisioterapeuta respiratorio le indicará los más apropiados para Ud., y aumentará su intensidad paulatinamente en función de sus posibilidades.
Algunas de las actividades que puede realizar son: ejercicios con pesas, cinta, bicicleta, caminar o marcha.
Aprender a utilizar correctamente los inhaladores
También se instruye al paciente en el correcto uso de los inhaladores, para que mantenga una buena adhesión al tratamiento, y este, sea mucho más eficaz. En las sesiones pediátricas se enseña a los padres a realizar lavados nasales efectivos y a utilizar la cámara espaciadora para que el tratamiento sea eficaz.
Obtener apoyo psicosocial
En este tipo de enfermedades, los pacientes suelen estar muy decaídos y tienden hacia la depresión. Se sienten abatidos y cansados, y en muchas ocasiones incomprendidos por su entorno familiar y social.
Apoyarles y ofrecerles recursos que les ayuden a tener un incentivo para afrontar su enfermedad con mayor optimismo, también forma parte del trabajo del fisioterapeuta respiratorio.
9 razones por las que estos tratamientos solo puede realizarlos un fisioterapeuta especializado en respiratorio
Si padece una enfermedad pulmonar o su hijo tiene en estos momentos una enfermedad respiratoria aguda como la bronquiolitis, el fisioterapeuta respiratorio es el profesional, que tras la valoración de su neumólogo o pediatra, actúa para complementar el tratamiento farmacológico que le hayan pautado.
Si aún se pregunta porqué y tiene dudas, aquí le explicamos las principales razones:
1.- Por la especialización
El fisioterapeuta respiratorio conoce el correcto funcionamiento de su aparato respiratorio, así como las patologías que pueden afectarle, y sabe qué técnicas y ejercicios son los más adecuados para tratarlas.
2.- Porque sabe interpretar pruebas médicas
Es capaz de interpretar las diferentes pruebas respiratorias que le hayan realizado y analizar sus resultados.
Entre ellas: espirometría, gasometría, TAC, RX, prueba de esfuerzo o análisis de esputo.
3.- Porque antes de empezar con el tratamiento realiza una valoración inicial de su estado de salud
Además de recoger la información aportada por otros profesionales de la salud dentro del equipo multidisciplinar que tratan su enfermedad, el fisioterapeuta respiratorio, en su primera sesión, va a realizarle una valoración exhaustiva, sometiéndole a sus propias pruebas médicas.
4.- Porque diseña programas de rehabilitación pulmonar con objetivos bien definidos
A partir de su valoración inicial, definirá sus objetivos de tratamiento y escogerá las técnicas más adecuadas para lograrlos.
5.- Porque la fisioterapia respiratoria no es hacer masajes
No consiste en aplicar masajes sobre el tórax con la idea de relajar su musculatura respiratoria.
Esta terapia incluye un conjunto de técnicas y ejercicios respiratorios, los cuales pueden necesitar o no de su colaboración, y que tratan las consecuencias que su enfermedad pulmonar le está provocando a Ud o a su hijo, como por ejemplo:
- Dificultad respiratoria o tiraje
- Exceso de mucosidad
- Debilidad muscular
6.- Porque las sesiones tienen un seguimiento y control
En nuestro caso así lo hacemos.
Tras la aplicación de las técnicas es importante hacerle un seguimiento y control con el fin de valorar si los efectos conseguidos son los esperados o, si es necesario, hacer modificaciones para reconducir su tratamiento.
7.- Porque es capaz de identificar problemas respiratorios para poder actuar de manera correcta y eficaz.
Si un fisioterapeuta no está especializado en respiratorio y no le evalúa correctamente, puede no darse cuenta de alguna situación en la que esté contraindicada la fisioterapia respiratoria, empeorando aún más su situación.
Por ejemplo, si el paciente sufre un broncoespasmo y el fisioterapeuta no lo detecta, al aplicar las técnicas respiratorias puede provocarle un colapso de la vía aérea, generando una mayor dificultad respiratoria.
Otro ejemplo es, si un niño se encuentra en la fase aguda de una bronquiolitis, donde los síntomas principales son fiebre, inflamación de las paredes bronquiales y dificultad respiratoria, tiene que saber que no se pueden aplicar técnicas de fisioterapia respiratoria, dado que podría propagar la infección y colapsar la vía aérea, siendo necesaria asistencia hospitalaria.
En caso de infección, el momento idóneo para trabajar la fisioterapia respiratoria es inmediatamente después de la fase aguda, no durante el proceso infeccioso.
8.- Porque sabe utilizar los dispositivos mecánicos de asistencia respiratoria
Además de conocer y saber aplicar las técnicas respiratorias más apropiadas para Ud, conoce los aparatos y dispositivos mecánicos necesarios, como por ejemplo el CoughAssist, orientando y asesorando a su familia o cuidador acerca de los parámetros correctos para su uso.
9.- Porque sabe diferenciar entre patologías respiratorias pediátricas y de adulto.
Las diferencias entre el aparato respiratorio de un niño y un adulto hacen que, a la hora de abordar las patologías que afectan a cada uno de ellos, los objetivos planteados en el tratamiento, así como las técnicas utilizadas, también sean diferentes.
Un paciente, un tratamiento personalizado
Como ve la fisioterapia respiratoria no es solo hacer unas cuantos ejercicios respiratorios, ni tampoco "quitar mocos a un niño".
Es una disciplina que complementa su tratamiento farmacológico y que requiere del estudio y valoración de su estado de salud, en qué situación se encuentra con respecto a su enfermedad y cuáles son sus limitaciones.
A partir de ahí, se diseña un programa de rehabilitación pulmonar adaptado a su situación, en el que pueda tener un seguimiento y control, y donde realmente aprenda y asimile la técnicas y pautas correctamente para conseguir resultados eficaces.
De nada sirve, que en 10 minutos se le expliquen los cuatro ejercicios que tiene que realizar y cómo mantener una buena adhesión a su tratamiento, si no tiene un seguimiento, y, además, Ud. no pone de su parte.
La idea es que aproveche al máximo las sesiones de fisioterapia respiratoria, pregunte todas las dudas que le puedan surgir, y aplique como parte de su rutina diaria, todos los ejercicios que le hayan pautado.
Si es así, podemos asegurarle que notará una evolución en su estado de salud, conseguirá reducir sus síntomas, tener menos recaídas y mejorar su calidad de vida.
¿Necesita que le ayudemos y diseñemos un programa de fisioterapia respiratoria específico para Ud. que pueda realizar desde su propio domicilio?
¿Su hijo ha pasado ya la fase grave de la bronquiolitis o neumonía y quiere terminar de eliminar las secreciones que aún quedan en su pulmón para evitar nuevas infecciones?
Solicítenos una cita, haremos una evaluación de su estado de salud, y apartir de ahí, determinaremos cuál es el mejor tratamiento y qué técnicas son las más apropiadas.
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Marta Godín Vivancos
- Graduada en Fisioterapia por la Universidad Pontificia de Comillas, nº colegiada 010328.
- Máster en Fisioterapia Respiratoria en IACES.
- Experta en Fisioterapia respiratoria pediátrica en la Universidad La Salle.
- Formación en Terapias Respiratorias a Domicilio TRDs por la Sociedad Española d Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR)
