Dispositivos de fisioterapia respiratoria que ayudan a eliminar las secreciones
Dispositivos de fisioterapia respiratoria que ayudan a eliminar las secreciones
La eliminación de las secreciones bronquiales es uno de los objetivos principales en el tratamiento de los pacientes con enfermedades respiratorias.
El fracaso respiratorio en estas enfermedades condiciona la acumulación de secreciones en la vía aérea, favoreciendo su obstrucción y aumentando su resistencia al paso del aire. Como consecuencia, el trabajo respiratorio incrementa, la ventilación disminuye y la oxigenación se vuelve mala.
A su vez, la acumulación de secreciones en la vía aérea favorece su colonización microbiana produciendo infección e inflamación, con el consiguiente aumento de la producción de mucosidad. Esta situación se convierte en un verdadero círculo vicioso que complica aún más el pronóstico de la enfermedad.
La fisioterapia respiratoria es una herramienta clave para eliminar las secreciones, ya que pone a disposición del enfermo, las técnicas más adecuadas a su situación que le permiten lograr una buena limpieza del árbol bronquial y recuperar la máxima capacidad funcional posible.
¿Cuáles son los dispositivos utilizados en fisioterapia respiratoria?
Dentro de la fisioterapia respiratoria se pueden emplear:
1.- Técnicas pasivas, realizadas con ayuda de un fisioterapeuta respiratorio experto en el tema o un familiar bien instruido.
2.- Técnicas activas, realizadas por el propio enfermo sin ayuda de otra persona. Para estas últimas, el paciente puede ayudarse de dispositivos que faciliten el resultado deseado. Son los conocidos como dispositivos PEP (Presión Espiratoria Positiva).
Los dispositivos PEP son instrumentos pequeños, portátiles y fáciles de manejar que se utilizan para la limpieza de la vía aérea en pacientes con enfermedades respiratorias que produzcan excesiva cantidad de moco en los pulmones.
Los más conocidos son:
¿Cómo funcionan estos dispositivos?
Al espirar a través de un dispositivo PEP, éste genera oscilaciones en el interior de la vía aérea haciendo que sus paredes vibren desde la boca hasta las vías más inferiores. El aparato interrumpe de manera intermitente el flujo espiratorio, al mismo tiempo que genera durante la maniobra una presión positiva por detrás del moco que lo empuja hacia fuera. De esta manera, conseguimos despegar el moco y drenarlo hacia el exterior.
Pasos que tiene que seguir:
1.- Se debe tomar aire lentamente por la nariz, realizando una inspiración un poco mayor de la habitual, pero sin llegar a ser profunda.
2.- Realizar una pausa respiratoria de dos o tres segundos mientras se coloca en la boca el dispositivo sellando firmemente su boquilla con los labios.
3.- Una vez colocado el dispositivo, espirar a través de él de manera controlada, notando como su vibración se trasmite en la vía aérea.
Esta maniobra debe repetirse en series de 10-15 repeticiones, respetando los descansos entre serie y serie para evitar la fatiga respiratoria. En caso de cansancio extremo, como precaución, se interrumpe el trabajo con el dispositivo hasta que el cansancio desaparezca y la respiración se normalice.
Después de cada sesión es muy importante limpiar el dispositivo, ya que ha estado en contacto con nuestra vía aérea y puede estar infectado. Para ello, se desarma separando sus diferentes partes, se lavan con agua y jabón, se aclaran y se dejan secar al aire.
¿Utiliza algún dispositivo como éstos para eliminar sus secreciones? ¿Lo complementa con ejercicios respiratorios? ¿Nota efectividad? Cuéntenos su experiencia.
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Marta Godín Vivancos
- Graduada en Fisioterapia por la Universidad Pontificia de Comillas, nº colegiada 010328.
- Máster en Fisioterapia Respiratoria en IACES.
- Experta en Fisioterapia respiratoria pediátrica en la Universidad La Salle.
- Formación en Terapias Respiratorias a Domicilio TRDs por la Sociedad Española d Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR)
