Las cinco pruebas más importantes que revelarán si tiene una enfermedad respiratoria
Las cinco pruebas más importantes que revelarán si tiene una enfermedad respiratoria
Se siente cansado y al más mínimo esfuerzo le falta el aliento, nota que la tos que tiene por las mañanas ya no es algo puntual, además con cada resfriado la acumulación de secreciones es mucho mayor y le cuesta eliminarlas con facilidad.
¿Se siente identificado con estos síntomas?
Si es así, debería acudir a su médico para que le realice pruebas que puedan determinar con exactitud si padece una enfermedad pulmonar crónica.
Las pruebas de función respiratoria permiten analizar cómo funciona su pulmón y sus vías respiratorias, y con ello diagnosticar si padece una enfermedad pulmonar, de qué tipo es y su grado de severidad.
Se trata de unas pruebas sencillas, y su efectividad dependen en gran medida del grado de implicación que Ud. tenga, a la hora de seguir las instrucciones que se le van indicando.
Pruebas de evaluación respiratoria
Ante la sospecha de una enfermedad pulmonar, éstas son las 5 pruebas más habituales que puede solicitarle su médico:
1.- Broncoscopia:
Es una prueba médica que permite visualizar el interior de sus vías respiratorias. Se realiza a través de un broncoscopio, un aparato en forma de tubo con un diámetro de medio centímetro aproximadamente y longitud variable, que cuenta con una cámara de video en su extremo.
La imagen recogida por dicha cámara se proyecta en un monitor.
A su vez, el tubo cuenta con varios canales en su interior por donde se pueden introducir distintos instrumentos. Éstos se suelen utilizar para determinar el diagnóstico y tratamiento de enfermedades de las vías respiratorias y de los pulmones.
Si quiere saber cómo se realiza paso a paso una broncoscopia, puede verlo pinchando en este link: Cómo se realiza una broncoscopia y para qué sirve
2.- Análisis de esputo:
Se utiliza para realizar un estudio de las infecciones del aparato respiratorio.
El objetivo de este análisis es identificar el tipo exacto de bacteria que ocasiona la infección respiratoria, con el fin identificarla y poner el tratamiento más adecuado.
Para realizar el análisis se recoge una pequeña cantidad de esputo en un bote estéril.
Luego se lleva al laboratorio de microbiología para analizarlo.
En muchas ocasiones, y por diferentes razones, los pacientes no son capaces por si solos de expectorar, y necesitan ayuda. Las técnicas de fisioterapia respiratoria favorecen el despegue y arrastre de la mucosidad desde los pulmones hacia la garganta.
En este artículo hablamos sobre cómo puede recoger su muestra en 3 sencillos pasos para luego llevarla al laboratorio
3.- Espirometría:
La espirometría es una prueba no invasiva que permite conocer su función pulmonar. Para realizarla es necesario un espirómetro.
La prueba más utilizada es la espirometría forzada, con ella se mide el flujo, es decir, la cantidad de aire que el paciente es capaz de soltar en un primer segundo.
La espirometría no le va a decir directamente cuál es el problema pulmonar al que se enfrenta, pero sí indica si la función pulmonar está alterada con un patrón obstructivo (el aire no puede salir fácilmente) o restrictivo (el aire no puede entrar). Esto ayuda mucho a la hora de establecer un diagnóstico y decidir cuál es el mejor tratamiento para Ud.
¿Su médico le ha pedido realizar una espirometría y no sabe muy bien en qué consiste?
En este enlace le hablamos sobre cómo se realiza una espirometría y qué se necesita para realizarla
4.- Pulxiosimetría:
Sirve para medir la saturación de oxígeno, o lo que es lo mismo, la cantidad de oxígeno disponible que tiene en sangre de manera no invasiva.
Para esta prueba se utiliza un dispositivo llamado pulsioxímetro que se coloca sobre alguna zona relativamente traslucida del cuerpo (como por ejemplo la yema de su dedo).
Este dispositivo emite luz con dos densidades de onda diferentes, una de 660 nm (luz roja) y otra de 940 nm (luz infrarroja) a través de su piel. En la cara opuesta del pulsioxímetro se encuentra un fotodetector, que se encarga de controlar la cantidad de luz que ha pasado por su dedo y no ha sido absorbida.
Para obtener el resultado, el fotodetector compara la tasa de luz roja con la tasa de luz infrarroja, dando como resultado el nivel de saturación de oxígeno que tiene.
Con cada latido se incrementa ligeramente la absorción, es decir, para que funcione tiene que encontrar pulso, o en caso contrario no sería capaz de medir nada.
5.- Gasometría arterial:
Mide la cantidad de oxígeno que tiene en sangre de manera invasiva.
La prueba consiste en la extracción de sangre de una de sus arterias en la que se medirán los niveles de gases que contiene (oxígeno y dióxido de carbono) y, a su vez, su pH.
Esta prueba es rápida y generalmente bien tolerada y con un riesgo mínimo para el paciente.
Tanto la pulsioximetría, como la gasometría arterial, son dos pruebas que sirven para medir el nivel de saturación de oxígeno en sangre.
Si quiere saber cuáles son los ventajas y desventajas de cada una de ellas, en este artículo: cómo se mide la saturación de oxígeno en sangre, hablamos de ello.
Fisioterapia respiratoria: parte fundamental del tratamiento
Con estas pruebas su médico puede realizar un diagnóstico más preciso y prescribir el tratamiento que mejor se adapte a sus necesidades.
Cuando se trata de enfermedades pulmonares crónicas, los programas de fisioterapia respiratoria son los mejores aliados.
En estos programas no solo se trata de que realice una tabla de ejercicios sin más, lo que se pretende con ellos es conseguir que su calidad de vida mejore y su función pulmonar en la medida de lo posible también, es decir, sirven, entre otros aspectos, para:
- Ayudarle a eliminar las secreciones y limpiar sus vías respiratorias.
- Aprender a respirar de forma adecuada para obtener la mayor oxigenación posible y reducir así su fatiga.
- Conseguir que pueda toser de forma adecuada y eficaz.
- Preparar un entrenamiento al ejercicio especialmente diseñado para Ud., que le permita realizar las actividades del día a día sin tanto cansancio.
Si ya ha sido diagnosticado, quiere gestionar de manera eficaz su enfermedad y aprender técnicas de respiración que le permitan mejorar su capacidad pulmonar, nuestros tratamientos de fisioterapia respiratoria le ayudarán a conseguirlo.
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Marta Godín Vivancos
- Graduada en Fisioterapia por la Universidad Pontificia de Comillas, nº colegiada 010328.
- Máster en Fisioterapia Respiratoria en IACES.
- Experta en Fisioterapia respiratoria pediátrica en la Universidad La Salle.
- Formación en Terapias Respiratorias a Domicilio TRDs por la Sociedad Española d Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR)
Pruebas, espirometria, broncoscopia, Pulsioximetría, Gasometría
